Nuevo evangelio: la justicia poética del fútbol

La organización dinfunde la nueva versión de Carlos El negro Santoro de lo ocurrido el pasado domingo en el encuentro disputado entre Pipicucu y Rosa molesta. El correo electrónico que acompaña los nuevos dicho, aclara: "espero no ofender a nadie y estoy a plena disposición para charlar con quien quiera lo que quiera". Ya lo sabemos Negro!

El partido:
Este veedor debe reconocer que llego 20 minutos tarde, con el partido ya empezado y con Alejandro Chirife (un amigo que pasaba por ahí), jugando en su lugar. Debido a esto, y a los cambios, el equipo nunca supo ordenarse. Cuando llegué ibamos perdiendo 6 a 2, y al rato ya estábamos 7 a 4, manteniendo esa distancia de goles que nunca pudimos reducir. Por momentos estuvimos cerca, llegando a estar 11 a 9 a favor de Rosa Molesta, y en un hecho delictivo por parte de Rosa, imponiendo que la diferencia en el marcador era de 5 goles, o sea 11-6, dejo perplejo a los miembros de PiPi que para evitar conflictos, decidieron ceder, sabiendo que lo ganarian justamente, si es que existe la tan hermosa justicia poética del futbol.
Cuando uno de ellos tuvo que salir por un resentimiento en los ligamentos, ofrecimos pasarles a uno, pero prefirieron jugar con 4 y estuvimos cerca de empatarlo. Fue en ese momento cuando Rosa Molesta empezó a pedir la hora, habiendo convertido sus ultimos dos goles y llegando a los inescrupulosos 13 goles.No estaba muy claro cuando debía finalizar el partido, así que cuando metimos el 11 (sin contar los 4 goles vilmente virlados) y teníamos el animo hinchado, ellos decidieron no sacar del medio y dar por terminado el encuentro.
Pese a la "derrota", Pipí Cucú está contento de haberse desempeñado con categoría dentro de la cancha, y sabe que en el próximo partido habrá sorpresas.